Sevilla a trozos....( II )

En noches de luna llena me cantó el Guadalquivir la belleza de la tierra... De los hombres.., el sentir.
Me habló de bravos toreros, que frente a la Macarena elevan fieles plegarias antes de pisar la arena. Y de la sangre de toros que tiñe de rojo vivo el redondel de la plaza; del torero, el atavío.
De abanicos de palmeras que el aire sin querer mueve; plumereando con las palmas el infinito celeste. De ferias y romerías, peinetones y manteles… Verjas de hierro forjado, jazmines, nardos, claveles...
De rosales trepadores cubriendo muros tostados... De guitarras y de besos, de melodías... De cantos. Horchata de cimpa fresca, opalina y perfumada... sabor andaluz que brilla en la luz de las miradas.
De la Virgen del Rocío que llevan en cabalgata, desde Sevilla hasta Almonte bañada en amor y en plata. y del sol... Del sol que dora los naranjos y olivares, los brazos de las mujeres, los rostros, playas y mares.
En noches de luna llena me cantó el Guadalquivir, la belleza de la tierra, de sus aguas... el latir.